Sentenciado a Morir (Death Sentence, 2007) al igual que el Vengador Anónimo (Death Wish, 1974) se basan en novelas del mismo nombre de Brian Garfield (escritas en 1975 y 1970 respectivamente). La película es dirigida por James Wan y estelarizada por Kevin Bacon, Kelly Preston y John Goodman. Al igual que Paul Kersey (Charles Bronson) en el Vengador Anónimo, Nick Hume (Kevin Bacon) se convertirá en un justiciero que quiere vengar a su familia tras la agresión sufrida a manos de un grupo de pandilleros. Nick y su hijo mayor Brendan (Stuart Lafferty) asisten a un partido de hockey, donde Brendan es uno de los jugadores del equipo. De regreso se detienen a cargar gasolina y en ese instante llega una pandilla a asaltar la estación de servicio. Brendan es asesinado por el miembro más joven de la pandilla con un machete. Cuando los maleantes huyen, Nick alcanza a ver el rostro del asesino de su hijo. La policía captura al homicida, Joe Darley (Matt O'Leary), quien es identificado por Nick. Durante el juicio los abogados le advierten a Nick que la condena será baja (tres a cinco años) debido a que no existen mayores pruebas en contra de Joe salvo el testimonio del propio Nick. Entonces cambia su declaración y le señala al juez que no esta seguro de que el detenido es el asesino de su hijo. Joe es entonces exhonerado y liberado. Nick observa a los pandilleros cuando recogen a Joe a las puertas de los tribunales y decide tomar justicia por propia mano. Durante la noche asesina a Joe con un cuchillo, pero es observado por una chica, quien resulta ser la hermana de uno de los pandilleros. Ella le avisa al líder de la banda, Billy Darley (Garrett Hedlund), hermano mayor de Joe, que Nick asesinó a su hermano. La pandilla es administrada por el padre de Billy y Joe, un traficante de armas apodado Bones (John Goodman). Billy y el resto de la banda decide atacar a Nick y su familia en su propia casa, matando a la esposa de Nick, Helen (Kelly Preston) y dejando gravemente heridos Nick y su hijo menor, Lucas (Jordan Garrett). Nick queda malherido pero no muere, al igual que Lucas, quien queda en coma. Cuando Nick se recupera decide acabar con el resto de la banda, a pesar de las advertencias de la detective Jessica Wallis (Aisha Tyler).
Sentenciado a Morir
Sentenciado a Morir resulta una película mucho más violenta que el Vengador Anónimo, pues se aprecian gráficamente los efectos del uso de escopetas y machetes (cortesía de James Wan , quien también dirigió Saw) en las secuencias de acción. Sentenciado a Morir destaca más por sus sanguinarias escenas que por la coherencia de su historia. A pesar de ello, destaca la buena actuación de Kevin Bacon como un atribulado padre de familia decidido a acabar con los asesinos de su famila.
Sentenciado a Morir: ** (Regular)